8M De la lucha obrera a la cabalgata solo hay un paso.

Hace dos días, en todo el mundo, se celebró el día de la mujer TRABAJADORA. Y subrayo y pongo en negrita esta palabra porque en la mayoría de publicaciones, noticias, etc. se ha borrado la palabra más importante de un día aún, por desgracia, muy necesario.

No olvidemos que el día nace el mismo día que la revolución rusa en el año 1917. Una manifestación de mujeres pidiendo alimento para los soldados y familiares de los soldados. ¿Qué es lo que los medios nos dicen? Que se celebra porque una fabrica fue quemada en EEUU. Noticia que es totalmente falsa (sólo buscad si tenéis interés). Esto es algo que yo aprendí de una camarada en el partido. Recuerdo que en los 90, el 8M era un día en que la mayoría de gente de partidos de izquierda salíamos a la calle a pedir por los derechos de nuestras compañeras trabajadoras, la mayoría de manifestaciones eran de unos cuantos miles como mucho si había suerte. Ahora resulta que el capital ha engullido esta manifestación. Y, al igual que ha pasado con los partidos de izquierdas, ha pasado de una manifestación por causas justas a una mascarada donde lo importante es la victimización y la defensa de colectivos minoritarios.

Cuando un día tan importante como es este, deja de usar una palabra como es trabajadora u obrera, pierde todo su sentido. Máxime si en los medios leemos que la reina Leticia dice secundar la huelga (que va a hacer, no ir a probarse un trapito nuevo o asistir a un besamanos) o la huelga dice ser secundadas por monjas (mujeres que viven dentro de una de las organizaciones más patriarcales que existen y que no tiene deseos de cambio), pues francamente, te das cuenta que ha perdido parte de su sentido. Sobre todo cuando sabes que en su día, cuando te manifestabas, la policía no te ponía alfombra roja para que desfilaras precisamente. Que alguna ostia de un madero he visto llevarse en piquetes en astilleros de Cádiz o en manifestaciones obreras en Barcelona. Además lees que la dueña del banco más importante de España se declara feminista, cuando sabemos que no les tiembla el pulso para desahuciar a mujeres de sus casas. Dice mucho de como han cambiado las consignas (sobre todo cuando se habla de un techo de cristal que afecta a la mujer burguesa, no a la mujer obrera). 
Uno viendo el panorama ve todo desde otro prisma. Especialmente cuando te toca regresar al trabajo camino al metro justo a la hora punta y vas mirando caras y pancartas. Ves adolescentes y veinteañeras portando pancartas sobre brecha salarial o justicia patriarcal. Chiquillas (yo que tengo 40 ya las veo como niñas), que igual no han trabajado en su vida o que no han pisado un juzgado. Juzgados donde, por cierto, si fueran tan patriarcales como proclaman sus cartulinas moradas (que por cierto le han costado más caras que las de cualquier otro color, ¡VIVA EL CAPITALISMO!), no veríamos las barbaridades que vemos en juzgados de familia donde en la mayoría de casos conseguir una custodia compartida es un imposible. O por no hablar de los juzgados de violencia de género donde existe un 35% de los condenados que lo son por la mera palabra de la acusada (díganme en que otro delito vería lógico que la única prueba para culpar a una persona fuera la declaración de la otra parte). 

Yo entiendo que, fiándose de lo que dicen los medios, esta justicia puede parecer patriarcal. Cada vez que hay un caso de violación se hace portada, se habla de que tal o cual persona aún no está en la cárcel y por tanto, es libre a pesar de haber violado, en vez de decir que la justicia es extremadamente lenta, y que, esas personas pueden haber pasado por una prisión provisional y luego usar el recurso de, nunca mejor dicho, recurrir para dilatar el proceso. Eso no significa que la justicia sea patriarcal. Por ejemplo, los de "La manada" acabarán en la cárcel. Otro tema es si pasarán 10, 20 o 30 años. Eso es algo que compete a los legisladores y sobre todo que es un tema que deben debatir los expertos en materia (psicologos, forenses, jueces, funcionarios de prisiones), no la masa encendida por una noticia. No olvidemos, Jesús fue crucificado y se salvó a Barrabás. Era un modo que la biblia tuvo de decirnos que a veces el clamor popular no significa justicia.  Lo mismo cuando se repite el #yositecreo o el #juanaestaenmicasa. Con la actual ley, se crea o no a la mujer, esta va tener un juicio; el hombre va a ser llevado a calabozos preventivamente. Otro cantar es que haya suficientes pruebas y si es culpable salga libre (pero esto ocurre también en otros muchos casos como en homicidios o en casos de narcotráfico o de corrupción). Pero es que si tenemos que creer si o si a la mujer, le estaríamos dando un arma poderosa. Un arma que cualquier mujer sin escrúpulos pudiera usar en un momento de arrebato por celos, por despecho, por el mero hecho de lograr ciertos réditos como pueden ser una custodia o un divorcio más favorable. Eso ya no sería justicia feminista, sería hembrista a ojos de cualquiera con dos luces.

Cuando todas las mujeres salieron a defender a Juana y la marea le era favorable, muchos dijimos: no juzguéis sin saber..... Pero cuando un informe psicosocial en Italia dijo que era una manipuladora y una madre que volcaba sus frustraciones en sus hijos, el mar se volvió en calma y hubo silencio general. No oí a ninguna de esas políticas, ni voceras televisivas decir: NOS EQUIVOCAMOS. ¿Tanto cuesta? Esa mujer pudo haber logrado quedarse con sus hijos con una simple declaración. Y lo que no es menos importante, costo miles de euros a todos los contribuyentes.

Porque si creemos a los medios, parece que viviéramos en Ciudad Juárez. Y créanme, he convivido con mexicanas, argentinas, colombianas..... Todas me decían lo mismo: "voy por la calle de noche y puedo sentirme segura". Yo salgo de noche en algunos de mis turnos y veo las calles y si fuera realidad lo que cuentan, veríamos algo tétrico y lo único que veo son niñas de 20 años asustadas por culpa del continuo mensaje de los medios que les dicen que las calles son inseguras, que toda mujer ha vivido un caso de acoso sexual (porque el "Hola guapa, ¿Estudias o trabajas?" ya es considerado acoso), que en España hay X violaciones (cuando en realidad hablan de que hay X denuncias pero mejor dar ese dato porque es más llamativo) cada día o que hay un número alto de mujeres asesinadas (somos el pais con la tasa menor de homicidios de Europa, la segunda menor en violencia domestica, quinto país del mundo donde es más seguro ser mujer).

Por eso cuando la huelga vuelva a ser de la mujer obrera, cuando se peleen por los derechos de las trabajadoras, cuando luchamos por tener una ley de conciliación laboral/familiar que permita que las mujeres no tengan un suelo de cristal; cuando hablemos de una ley de custodia compartida preferente que ayude a que ambos progenitores se responsabilicen por igual de los hijos, ayudando así a que la mujer pueda tener una mayor libertad de horarios para poder ejercer un trabajo a jornada completa. Ese día, ese día volveré a estar a su lado en la huelga. Pero me temo, muy mucho, que dentro de 10 años, el 8M tendrá autobuses morados con mujeres vestidas con pelucones lilas, con sus sobacos velludos teñidos de morado y se organizarán actividades lúdicas y las políticas liberales de turno junto a los artistas del momento (que igual se manifiesta en favor de un golpista como Guaido, que suben foto a sus redes con un ojo pintado, mientras le deben dinero al fisco español) saldrán a dar mítines. Y mientras, las mujeres seguirán teniendo inestabilidad laboral en el momento en que decidan ser madres o tengan un familiar anciano o enfermo al que cuidar. 

Vamos lo mismo que pasa con el mundo LGTBQI, donde el día del orgullo dejo de ser un día de reivindicación, de lucha por los derechos a ser una excusa más para emborracharse por las calles. Mientras que aún, la mayoría de personas gais o lesbianas no pueden vivir su sexualidad con normalidad (especialmente en zonas rurales) y donde los transexuales siguen siendo fuertemente discriminados a la hora de encontrar trabajo.